Un nuevo análisis realizado por el Instituto de Investigación sobre la Carencia de Hogar de la Alianza Nacional para Erradicar la Carencia de Hogar demuestra que el incremento general de la situación de carencia de hogar en los Estados Unidos está impulsado por un marcado aumento en la carencia de hogar crónica.
Las personas que experimentan carencia de hogar crónica son aquellas con episodios prolongados o recurrentes de carencia de hogar, mientras que simultáneamente viven con una discapacidad. Estos individuos presentan las necesidades más elevadas y requieren los servicios e intervenciones más intensivos.
El análisis muestra que desde 2016, la carencia de hogar crónica ha aumentado en un 79 por ciento, superando ampliamente la carencia de hogar general y la carencia de hogar entre adultos individuales. Además, el análisis determina que las personas con patrones de carencia de hogar crónica representan dos tercios del aumento total en la carencia de hogar desde 2016, según el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de los Estados Unidos.
Para revertir esta tendencia, es esencial que el gobierno federal realice las inversiones necesarias para expandir la capacidad de Vivienda de Apoyo Permanente (PSH, por sus siglas en inglés). La PSH es una intervención probada para hogares crónicamente sin hogar, que combina asistencia de vivienda a largo plazo con servicios integrales intensivos de apoyo para ayudar a las personas a estabilizarse y prosperar. Sin embargo, con más de 143,000 adultos individuales experimentando carencia de hogar crónica en una noche determinada en 2023, la capacidad de PSH necesitaría expandirse dramáticamente para satisfacer las necesidades de esta población vulnerable y creciente.
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